Eugenio María de Hostos, nacido en Mayagüez, Puerto Rico en 1839, fue un líder visionario profundamente comprometido con la erradicación de las desigualdades sociales, raciales y de género. Hostos abogó por sus ideas en Puerto Rico, la República Dominicana y a través de las Américas, lo que le valió el título póstumo de "Ciudadano de las Américas".
Durante años abrazó la idea de una Confederación Antillana para fortalecer su independencia, libertad y soberanía. Enfatizó que Puerto Rico y la República Dominicana compartían la misma estructura geográfica, sistema montañoso, clima, así como las mismas zonas agrícolas, comerciales e industriales. Creía que, dadas estas similitudes y cercanía geográfica, Puerto Rico y la República Dominicana (junto con otras islas de las Antillas) debían formar una alianza crucial para sostener la economía y el estatus social de sus respectivas naciones caribeñas. Hostos falleció en 1903 y, en reconocimiento a sus contribuciones a los pueblos latinoamericanos, es el único extranjero sepultado en el Panteón Nacional de la República Dominicana, donde reposan todos los patriotas dominicanos.
Nos enorgullece nombrar nuestro proyecto en su honor, con la esperanza de continuar su legado y bendecir nuestros esfuerzos con su fuerza unificadora para las naciones.